LOS HOSPITALES UNIVERSITARIOS EN EL LABERINTO DEL MINOTAURO
Hoy los hospitales universitarios parecen encontrarse en el centro del laberinto que Dédalo construyó y lo que no sabemos es cual será su futuro. Escaparan del laberinto o Teseo les dará el fin. Puede existir una facultad de medicina sin hospital universitario? o más bien una facultad puede segmentar la formación de sus estudiantes en muchos centros de práctica en forma indistinta sin tener consistencia con su modelo antropológico o la visión epistemológica que reposa en su ideario particular?
El sistema de salud de Colombia; carece de un modelo integral de salud ; esta desarticulado y hoy las personas lo buscan en forma reactiva: solucionando los síntomas y signos que aparecen, esto implica un colapso en los servicios de urgencias y unas islas de consulta externa desarticulada de la realidad y epidemiología del país. Adicionalmente la supra-especialización de la medicina ha generado una demanda creciente ; donde el paciente quiere atención segmentada de sus necesidades. No hay suficientes especialistas ; menciona el gobierno . Pero lo que probablemente sucede es que aun no hemos visto la articulación de redes o la geo-referenciación de pacientes de acuerdo a su sitio de vivienda o trabajo y sobretodo la posibilidad de lograr portabilidad de su historia clínica. Todos seguimos esperanzados en la implementación de la ley estatutaria de salud.
Pero al final independiente de las normas o resoluciones de los entes de control donde ordenan por escrito las oportunidades de consulta para ciertas especialidades; estamos viendo que hay concentración de esas especialidades en regiones del país y carencia en otras. Las integraciones verticales tratan a toda costa de suplir ese problema; pero se vuelve un circulo vicioso donde el médico general es un experto "remitologo" y lo que hace es dividir mentalmente al paciente y referir al encargado del segmento topográfico o del experto en cada área de la salud para su diagnostico y tratamiento. Esto además de ineficiente es costoso.
La pregunta es: Quienes y donde se forman los médicos y especialistas en nuestro país? Al revisar las estadísticas de la oferta del recurso humano en salud; las cifras son realmente desalentadoras con la proporción de habitantes de nuestro país.

Y no es mejor la oferta de camas disponibles al compararla con otros países; en la estadística publicada en el portal INDEX MUNDI ; nuestro país aparece en el puesto 136 con un indice de 1,4 camas por 1000 habitantes . Lo que genera un análisis complejo frente al número de camas que en el sector público crecen y los nuevos proyectos privados surgen ; pero en el momento hay una amenaza de la sostenibilidad de esas camas frente a la crisis de financiamiento que esta enfrentando el sector de la salud.
FUENTE : index mundi.
http://www.indexmundi.com/g/r.aspx?c=co&v=2227&l=es
Por un lado tenemos una pobre oferta de camas y por otro lado se disminuye la posibilidad de la formación de médicos alrededor de esas camas.
La medicina como profesión abarca una serie de conocimientos, elementos propios, particularidades y ejercicio, que se sintetizan en certificaciones o títulos que la acreditan. ,esto se remonta a principios del siglo XIII en Italia donde se dan unas pautas de tiempos mínimos de práctica y ejercicio para poder reconocer como profesional a quien desea ejercer la medicina. Tiempo después, en Europa se asimilarán esas escuelas de medicina a las universidades: “Universitates magistrorum et discipulorum”. En Colombia asumiremos el modelo de Flexner en los años 50 ; que de alguna manera es lo que se ha venido desarrollando como modelo de hospital Universitario. Sin embargo en los últimos años se han dado nuevas reglamentaciones para definir el modelo cara al sistema actual de salud.
En Colombia existen dos tipos de instituciones que se denominan como "Hospital Universitario": primero las instituciones que surgieron de la fundación de una Universidad para poder desarrollar su proyecto educativo institucional en la necesidad de formar personas en salud, quieren dejar la marca de agua de su visión de formadores y transferir al escenario clínico la docencia, la investigación y la extensión universitaria.Y segundo los hospitales que no dependen de una universidad y que por accidente o por tradición han albergado personas que quieren formarse en sus corredores con distintos convenios sin definir un proyecto educativo específico. Inclusive se encuentran instituciones que pueden tener múltiples convenios y ofrecen sus volúmenes de pacientes y tecnología para entrenar personas en competencias específicas en áreas de la salud. De los aproximadamente 55 registros calificados de facultades de medicina en el país apenas 17 poseen un hospital universitario propio o asociado a sus facultades de ciencias de la salud.
Pero al revisar que reglamenta un hospital universitario hoy encontramos la ley 1164 de 2007 donde con claridad define que el hospital universitario debe además de manifestar en su misión la vocación a la docencia y la investigación, facilitar los escenarios formativos, convenios de docencia, infraestructura física y lo que definitivamente marca la diferencia es que debe estar acreditado en salud. Posterirormente la la ley 1438 de 2011 en el articulo 100 deja claro que a partir del 1 de enero de 2016 no podrán denominarse los hospitales que no cumplan con lo enunciado. Lo complicado es que los procesos de acreditación en Colombia han crecido muy lentamente. A la fecha de las 32 IPS acreditadas; solamente como Hospital Universitario misional hay 3 y los demás tienen convenios docencia-servicio sin que necesariamente su vocación misional sean ser Universitarios.
Según lo anterior estaremos viendo alguna prorroga reglamentaria de última hora ; que permita dar un indulto en el tiempo para que la mayoría de hospitales logren cumplir con ser acreditados en algún momento. Sin embargo en mi opinión esto no es lo más importante. La propuesta debe ser más integral para estos Hospitales: facilitar recursos de investigación, asegurar la coherencia en procesos de docencia, asegurar una formación integral para que no sean únicamente escenarios de práctica sino se logren procesos curriculares integrados en la formación de quienes allí se forman, lograr incentivos basados en sus niveles de calidad, facilitar el relacionamiento con las entidades promotoras de salud para que se integren en redes de atención en favor de los pacientes, exenciones tributarias, rebajas fiscales de importación de insumos y tecnología para desarrollar mejor la labor de atención de pacientes con una visión académica.
De no ser así seguiremos teniendo pocos espacios para la formación de nuestros médicos y enfermeras y por otro lado no lograremos subir los niveles de calidad en lo educativo y asistencial de los llamados hospitales universitarios.
Una tarea importante para los ministerios de salud y educación , para las universidades y hospitales y por supuesto para quienes por vocación quieren ser formadores de recurso humano de salud en el contexto de la cabecera de un paciente; será buscar articular estos escenarios en un modelo educativo integral y que se favorezca su desarrollo particular con la visión de la alta calidad que un hospital universitario como centro del conocimiento debe liderar en el siglo XXI en nuestro país.